Julián Pagura: "tenemos que hacerles entender a los jugadores que nadie es más que nadie"

El recorrido entre formativas y profesionalismo le ha dado al entrenador venadense un aprendizaje y caudal de información que suma a la hora de proyectar trabajos en los clubes. Más allá de su trabajo específico en el básquet como entrenador, las diferentes historias, problemas y soluciones que encontró a lo largo del camino le han permitido sintetizar un conocimiento que se vuelca a todos aquellos que lo quieran escuchar. Las charlas que está dando en diferentes lugares del país apuntan a la organización, planificación y los vínculos entre jugador, club y familia. El 23 de Diciembre ofrecerá en Newbery de Venado una para todos los que quieran escuchar. La propuesta está destinada a todos los deportes de conjunto y en este reportaje pudimos meternos más de lleno en el eje central de las mismas.

-Sos un tipo de mucho trabajo  en el baquet de alta competencia con recorrido y con tiempo compartido con inferiores y primera división.  Y ahora proponés que tu conocimiento puede estar más allá del básquet y que tus experiencias puedan servirle a otras disciplinas, a padres y directivos. Contame como surgió esta propuesta de tus charlas para todos los deportes.

-La verdad que como todas las cosas que uno va trabajando en la formación o en el trabajo con jóvenes como nació al principio el tema de los Campus, siempre por una necesidad. El tema de las charlas que se vienen haciendo parte de una necesidad de jóvenes o chicos que están estudiando educación física o entrenadores que agarran recién un club y te llaman y preguntan. Me pasa esto, no se como manejar esta situación, tengo problema con este papá, los dirigentes me pidieron una cosa y ahora me están pidiendo otra. Entonces uno va recabando información a través de preguntas que te permite estar por varios lugares. Yo hice y hago muchas charlas de ENEBA y ahí eso te genera que conozcas mucha gente, los campus también y terminás yendo a la Rioja y vas a distintos lugares. La verdad que en estos últimos años he hecho muchas de esas cosas pero más que nada por que te llaman para trabajar con los chicos del club y hacer una situación y voy contando la experiencia. Nace a través de eso, de la necesidad de poder trabajar con lo que no está en los libros, con la experiencia de uno, con la necesidad que sienten los formadores y hasta la gente más grande y que por ahí le planteás una forma de comunicarte con la familia de los chicos tips que son iportantes para no tener errores en la comunicación. Hay cosas que van saliendo nuevas que uno se tiene que ir agiornando. Yo fui a dar una charla a ENEBA a Catamarca y en el final se tocaron un part de puntos de estos y el jefe de deportes de Catamarca me citó para ir a dar una charla y la verdad que salió muy bien y eso me enfocó para poder darlas en distintos  lugares y me sentí bien porque son cosas que resultan muy útiles y como te dije no están en los libros, ayudan mucho al entrenador y no necesariamente del básquet porque esto está destinado a todos los deportes de conjunto.

Tiene que ver con las problematicas que se desprenden de la relación diaria, no solo deportistas profesor, sino también familia. El club que en algunos casos también es padre de deportistas y que no pertenece al profesionalismo. Aquí en el sur de nuestra provincia las podemos pensar para cualquiera de los clubes y de cualquier disciplina femenina o masculina.

Si,creo que el problema más grande que tiene el deporte en su conjunto es que la parte dirigencial no tiene claro lo que quiere, se le da el poder al entrenador, este muchas veces no tiene la experiencia necesaria para poder llevar adelante lo que no dijeron que haga, por ahí es complicado lo que voy a decir pero es así. Muchas veces el dirigente le da las llaves al entrenador y le dice hace lo que vos quieras -no estamos hablando de un deporte específico, estamos hablando en general – y le dice quiero que los chicos entrenen todos los días, quiero tener cantidad y a lo mejor el mismo dirigente o papá de comisión o allegados le dice al entrenador, queremos que los chicos sean respetuosos, que representen bien al club y a los pocos días le pueden estar haciendo una reunión porque no le gusta la forma en la que está trabajando. Y en realidad tampoco eligieron ellos la idea de la dirigencia. Creo que a partir de ahí surgen un montón de situaciones y la situación que más me preocupa es la de entendimiento de lo que significa la formación, o sea que significa ganar, formar, porque yo puedo perder y estar ganando al mismo tiempo. Me ha pasado de tener un equipo que sabía que iba a perder a un nivel profesional pero que el desafió era que el equipo vaya superándose y que esos  jugadores terminen jugando todos a nivel profesional y también es un desafío. Por ejemplo si vos te encontrás un equipo de fútbol que tiene problemas para tener cantidad de chicos, que tiene problemas económicos para traer jugadores para armar el equipo, que a lo mejor en tal división no tienen la posibilidad de poder tener un equipo competitivo, no es que hay que trabajar cuando tenés una camada de 7 u 8 jugadores buenos, hay que trabajar siempre y el trabajo significa hacerlo en las bases para que los chicos puedan desarrollarse y puedan ser mejores y creo que el desafío está ahí. Tenemos que tratar de ser mejor de lo que podemos dentro de un montón de aspectos, el organizativo por ejemplo. Cuando y llegué a Sarmiento de Junín el objetivo era que los chicos sean disciplinados, no que salgan campeones, que saluden, que no les cobren técnicos, que respeten horarios de entrenamientos. Ese fue el objetivo que propusieron las 4 o 5 personas que estaban a cargo de todas las formativas. Por ahí pasa el tema, para mí una de las debilidades más grandes es que los clubes dejan en manos de entrenadores un montón de cosas que después cuando se empieza a trabajar se dan cuenta que a lo mejor hay cosas que no plantearon o no les gustan y sobre la marcha empiezan a querer cambiar la situación. Un ejemplo claro, es como si llamás a un arquitecto y le decís quiero hacer una casa de 2 habitaciones y cuando el tipo termina de hacer la superficie, los planos –no tengo idea de arquitectura- y cuando está levantando las paredes venís y le decís no pero yo quiero una habitación más y la cocina del otro lado. El tipo te va a decir mirá no se puede ya lo estoy haciendo de esta manera, me dijiste que te haga 2 dormitorios, no me dijiste  como la querías. Esa es la negligencia que aparece en el deporte de formación, porque al no tener una idea clara se le hace perder el tiempo a los chicos que ya no van a tener 9 o 10 años nuevamente.

El desafío es aunar criterios, concientizar y clarificar los objetivos de un proyecto . Tienen que estar de acuerdo los protagonistas no solamente los niños que van a aprender si no los papás que tienen que entender cuales son los objetivos y si no los comparten pueden llevarlos a otro club. Aunar criterios para entender que esas ideas van a ser defendidas más allá de los resultados porque la vara para medir no es la del triunfo en una etapa formativa porque es la del aprendizaje permanente.

Ni más ni menos, te pongo el ejemplo claro de las selecciones, cuando se arman en fútbol, básquet, vóley o hockey, con chicos adolescentes. Se hace una preselección, se los llama a los chicos para representar la ciudad o la asociación o liga, entonces el entrenador dice me gustan todos estos jugadores y arma el listado que vendrá a la pre selección ¿Cuantas veces el entrenador hace una reunión de padres? Para comentarles a los papás y mamás de los chicos que si uno acepta a ir a una pre selección directamente o indirectamente está aceptando quedar afuera de esa pre selección.  Lo que estoy diciendo es algo obvio, en un deporte donde hay 18 citados, o 20 a vos te dicen que vas a ser parte de 20 jugadores en un equipo de 12 y que 8 van a quedar afuera. Yo tengo que  saber que cuando acepto ir también acepto que puedo afuera y eso aunque parezca algo obvio, ya te genera algo un problema menos porque hacés una reunión con los papás de esos adolescentes y le decís, nosotros elegimos estos jugadores donde están sus hijos dentro de esos 20 pero en realidad los que van a quedar son 12, pero queremos aclararles que si aceptan venir a entrenar sus hijos, directamente están aceptando que pueden quedar afuera porque los equipos –por ejemplo en el básquet- no se arman con 12 buenos, se arman con 3 bases, 3 aleros, 4 pivots, y le explicás la mecánica a los padres porque hay muchos que no la conocen.  Así pasa también con los clubes, si yo tengo una institución en donde apunto a una situación determinada yo la tengo que plantear porque si hay alguien que viene con otra idea ,como vos bien dijiste en la pregunta, y no le gusta lo que estoy planteando, agarra y se lleva el chico a otro lado y no está mal. Eso es generar un conflicto menos y explicar por ejemplo en las reuniones, nosotros no vamos a aceptar que los padres se metan en el trabajo de los entrenadores y estamos hablando que en la práctica esto pasa con chicos de 18 o 19 años que están en las puertas del profesionalismo y los padres te  miran como diciendo “está bien lo que decís, yo no me puedo meter en tu trabajo”, pero cuando la pelota comienza a rodar aparece un papá que te viene hacer un planteo después de un partido “por qué mi hijo jugó menos minutos o porque no jugó o no lo citaste”. No estamos diciendo que no aliente, no se enojen que no le parezca mal algo, estamos diciendo que no se metan en un terreno donde no se tienen que meter. Si vos lo planteas desde el primer día  y decís yo me manejo de esta manera, me gusta esto, no voy a tolerar esto, lo importante es tal situación. Lo mismo pasa con los jugadores, he dirigido formación desde cebollita en adelante todas las categoría y me ha pasado tener reuniones al inicio del año con chicos de 13 años y presentarle una carpeta con las normas que son: el que llega tarde no entrena, teníamos reglas que si a alguno no cobraban técnico no jugaba en todo el partido y eso se lo explicábamos a los padres porque por ahí venía un papá y te decía “no lo dejaste entrenar a mi hio porque llegó 5 minutos tarde y te largaba todo el rollo de lo que le estaba pasando a él y vos le decías pero la regla estaba clara el que llega tarde no entrena y es la misma para todos. Y si vos te enojaste en un partido y te cobraron una falta técnica, por más que seas el mejor jugador  vas a quedar afuera pero esto no es lo mismo que lo sepás vos a que lo sepan vos, tus jugadores, los dirigentes y los familiares de los jugadores. Entonces cuando hablamos de planificación hablamos de eso, no salirse del foco  de lo que uno quiere, anotar en un papel las cosas importantes y básicas y plantearlas. Otras de las cosas que suceden es que muchas veces no entienden los padres lo que significa el trabajo de formación o sea yo si quiero mejorar la competencia tengo que salir a competir a otros lados y para eso tengo que trabajar, vender rifas, pollos, empanadas, hacer un chancho móvil o una fiesta. Cualquier cosa que permita recaudar, pero eso no es solamente para recaudar fondos es para enseñarles a los chicos el trabajo en conjunto, el sacrificio, que para ir a un lugar y mejorar tengo que romperme el lomo como cuando le toque ir a estudiar o sea es muy amplio el tema y es importante entenderlo de esa manera.

Adaptando esto a las comunidades chicas donde se debe hacer todo lo posible para que el chico este en el club porque no hay tantas opciones, el secreto está en la palabra, en la comunicación más allá de lo deportivo. Cuales son los conceptos a utilizar, cuales las identidades de cada lugar pero fundamentalmente  sostener que cuanto más hablemos y sepamos todos más fácil será lograr algunos objetivos y transitar el año con cierta lógica inclusive si no se tienen grandes objetivos.

Tal cual lo decís, a nosotros nos pasó con un equipo de chicos de 14 años con los que arrancamos con la idea de poder competir de la mejor manera y esos chicos pasado el año terminaron saliendo campeones de Sudamerica de la categoría U15. Un día allá por el 2010, después de ese logro y algunos campeonatos provinciales, argentinos y locales que habían conseguido en todo eso año.  En el 2011 yo empecé a sentir que los chicos estaban creyéndose un poco más de lo que eran y los senté a todos sobre la línea de mitad de cancha –nos habían hecho una gigantografía en el club- y los puse a todos mirando esa gigantografía y les dije “diganmé¿ cuantos de ustedes allá cuando arrancamos a entrenar en el 2010 se imaginaron esto que nos pasó? El haber hecho por primera vez un viaje en avión para ir a jugar a otro país, haber jugado contra equipos de otros países, haber salido campeones sudamericanos, provinciales, argentinos muchos de ustedes ser citados para pre selecciones argentinas . Diganmé ¿Cuantos se imaginaron que podía pasar? Entonces los chicos se empezaron a mirar y decir “no lo imaginábamos”, “no imaginamos que sería de esta manera”. Porque doy este ejemplo porque las cosas son así cuando uno las siente y tiene el grado de inconsciencia lindo las cosas pasas naturalmente. Cuando uno se para a pensar en lo que hizo y a creerse que uno es bueno ya deja de sentir y deja de ser natural entonces te empieza a afectar todo y el objetivo del deporte es que cada persona que lo está practicando se sienta importante, sienta que evoluciona, que es parte de algo. Hacerles entender que no es importante meter goles o puntos únicamente, es importante obviamente que si pero también lo es aquel que no juega y mantiene el grupo únido, aquel que mete un bloqueo, da una asistencia, el que en el fútbol tapa todas las llegadas del rival, el que se tirá de cabeza a la pelota y a lo mejor tiene menos talento que el que más tiene de su equipo. De eso se trata el deporte y la vida misma, tenemos que hacerles entender a los jugadores que nadie es más que nadie, que somos iguales, que es igual que otro pero la vida te va poniendo en diferentes situaciones que vos tenés que actuar y que hoy te va a tocar ser un buen jugador y mañana un buen compañero y lo vas a tener que saber hacer. Es muy fino lo que estoy diciendo pero hay que entender que es parte del trabajo del formador ¿Por qué el jugador que juega bien tiene que tener malos hábitos? Y al que no juega bien entre comillas o no es destacado yo tengo todo el tiempo que retarlo, exponerlo o ponerlo en evidencia. El entrenador, formador o preparador físico, en general tiene que tener en claro como tratar a cada uno, por eso hoy no solamente es importante saber del deporte, también hay que armarse un buen grupo de trabajo, el que pueda y tenga la posibilidad de tener un psicólogo, nutricionista, de hacerle entender a los chicos un montón de cosas que no se pueden hacer y muchas veces no tienen que ver con el dinero, tienen que ver con la organización. Me ha pasado que en lugares donde no teníamos el dinero para poder hacerlo, tener gente que quería hacer experiencia con los chicos y que se venía a trabajar para hacer la parte psicológica o nutricional, como también estado en lugares en el que veía que un jugador tenía mucho para dar y el club no le podía dar gimnasio o nutricionista –estamos hablando de una situación profesional en este caso- y yo le hacía entender al jugador que  él tenía que apostar a eso porque los veía como un gasto. Hay muchas cosas por desandar pero lo más importante es lo que vos dijiste en el inicio de la pregunta, el que hace algo lo hace para sentirse bien porque es donde tiene plenitud, donde no está pensando sus actos si no que está sintiendo lo que hace y que es la parte más natural del ser humano y eso es lo que tenemos que pregonar en los entrenamientos que sea dinámico, que todos sean parte, saber como tratar a uno porque según quien sea un grito lo motiva y a otro el mismo grito lo desmotiva y presionar para que las cosas se hagan de la mejor manera sin tener miedo a que el chico abandone el deporte. En realidad eso también es algo que tenemos que ver, la deserción del deporte generalmente viene entre los 14 o 15 años pero es también porque ahí se empieza a poner más énfasis en las reglas, las presiones y decirle como hay que hacerlo, no digo que haya que hacerlo más abajo y que haya que presionar a los chicos. Digo que siempre se tiene que tratar de hacer lo mejor de la mejor manera, tratando de que hagan un mejor trabajo sintiéndose importante. Es amplio lo que hablamos pero tiene que ver con eso.

Por último que conceptos agregarías, que son aquellos que son condimento esencial de las charlas que estás ofreciendo. 

Basicamente es no agarrar un trabajo por agarrar, saber adonde voy, porque lo hago, como lo hago y con quien lo hago, a quien va destinado mi trabajo y algo que hay que desterrarlo de la profesión nuestra –sea profe, o entrenador- es que muchas veces generamos trabajo, obviamente para poder vivir y para poder tener un mayor ingreso, pero sin darnos cuenta que a veces tomamos trabajos que no vamos a poder hacer y que a eso también va apuntada la charla. Por eso es importante la parte dirigencial, la pasión con la que uno hace las cosas es la que al otro o al chico lo vas a llevar de la nariz porque el chico ve que lo que hacés es con pasión y a él también le va a generar esa pasión pero básicamente hay que tener en claro lo que úno quiere hacer. A nivel cultural nosotros casi siempre ponemos en los lugares en donde más necesitamos capacitación ponemos a los menos capacitados por una cuestión económica. Podría decirse así,  no digo que sea en todos los lados iguales pero quien dirige la categoría de 10 u 11 años, el que recién se recibe, el que recién arranca y no digo que este mal porque a mí me ha pasado también de dirigir chiquitos cuando estaba estudiando educación física. A lo que quiero ir es que si la pata dirigencial tiene claro que es lo que quiere todo lo demás es mucho más fácil y principalmente los tiempos de trabajo. Muchas veces pasa que  queremos hacer fundamento con un chico de 10 años y el chico no sabe correr y como puede pasar eso, nosotros le estamos dando un obstáculo y el chico no sabe correr o sea, la pelota para él va a ser un obstáculo porque no va a poder ni llevarla con el pie derecho o el izquierdo ni picarla con mano derecho o mano izquierda porque no puede dominar su cuerpo, entonces tiene que haber planificación y que no sea para todos iguales y hablar con la familia estas cosas . Generar una situación para que todos vean que lo que estás haciendo es para el crecimiento individual y colectivo del lugar donde estás trabajando. No hablamos ni de cantidad de gente de habitantes por lugar, no hablamos de dinero, de nada que no tenga que ver con capital humano especializado principalmente con pasión y ganas para hacerlo lo que nosotros queremos que hagan. Estoy cansado de escuchar dirigentes que hablan mal de sus entrenadores o entrenadores dentro del mismo club que hablan mal de colegas de otras divisiones cuando en realidad después cuando  la cosa se mueve y va de un lado hacia el otro todos terminan haciendo lo mismo. Nadie escapa a que todos busquen el resultado y que todos queremos ganar el tema es básicamente ¿Qué significa ganar? Ganar significa meter más que el otro, o significa superarte, ser mejor, mejorar en algunos aspectos, mejorar en la organización. Me parece que hay que desestructurar el tema de que lo único que importa es ganar que es lógico y está bien pero eso es para un deporte profesional. Yo si dirijo un equipo de Liga Argentina o Liga Nacional o de Federal y armó un equipo para jugar el Federal por ejemplo , tengo que ganar porque si no gano me echan. Ahora si dirijo un U17 y no tengo el equipo para poder ganar me tienen que echar si no trabajo con los chicos, si a mí  me ganan equipos que son menores que nosotros y lo hacen solamente con trabajo. Ahí si me tienen que echar pero si yo trabajo ordenadamente, los chicos tienen un crecimiento, ven que hay 2 o 3 jugadores se van a otros lugares porque están creciendo y necesitan un mejor lugar para poder desarrollarse, yo tendría que trabajar toda la vida en esas divisiones.